miércoles, 23 de noviembre de 2016

¿Y cuál es el problema, ahora?

Porque siempre los resultados eleccionarios sino son los mismos, son idénticos. Los comicios de 1990 fueron turbulentos, y de los más polémicos; el fraude como de costumbre conto los votos. 

Para muchos Las elecciones la  ganó Juan Bosch y el PLD, no así, el triunfo le fue adjudicado  a Joaquín Balaguer. 


Con una Junta Central Electoral uniformada de mentiras y  un ambiente enmarcado y caracterizado por  denuncias de fraude acentuándose  una aguda crisis económica, en ese Partenón de Atenas, se desarrollaron los comicios de  1990.

Quien era el presidente de esa tradicional madriguera (JCE) ? El Dr.Froilán Tavárez 1987-1990, quien se encargó de organizar el desorden.


Los comicios de 1990, siendo los candidatos Joaquín Balaguer, quien se repostuló por el Partido Reformista; Juan Bosch por el PLD y José Francisco Peña Gómez por el PRD. Nuestro pasado en materia de escogencia en el tribunal electoral  es un postulado que se reitera. Desde el 1930 hasta hoy  solo ha cambiado la agonía…


El presidente ido a destiempo, Joaquín Balaguer, fue y sigue siendo la pizarra del fraude en República Dominicana. Era  el sofá de la era, el ampáyer de lujo de la dictadura trujillista, en materia electorera, mejor dicho detrás de la cortina de sangre…


¿Y cuál es el problema, ahora?


En toda nuestra historia, quien gobierna y su partido, designan en la Junta Central Electoral (JCE) a miembros de su organización política, y del tren judicial vigente que respondan al mercado del corrupto sistema imperante con la intención fundamental de reelegir el fraude
    Gaceta Oficial,Trujillo/4257/13/6/1930/Balaguer/Electoral

El Primer montaje fraudulento que registra la historia electoral dominicana.16 de Mayo, 1930, legalizado por el Lic. Roberto Despradel, quien por intermedio del Decreto1292 sustituye al Dr. Domingo Estrada, quien renuncio como presidente de la Junta Central Electoral por no estar de acuerdo con el estado de violencia y represión en aquellos comicios, ejecutado por Trujillo.

La oposición encabezada por Horicio Vasquez fue mancillada y agredida por personeros armados y militares fanáticos del continuismo, al final fue  derrocado por el dictador mediante un Golpe de Estado.



¿Y cuál es el problema, ahora?


El Partido Dominicano, con su sed de eternizarse en el gobierno, llevaba al pueblo al matadero electoral, y nombrando un sequito en la Junta Central Electoral, de los hombres más sabios y honorables de la época, con la finalidad de convertir la isla en un santuario de su devoción.

El cernícalo del Caribe, se impuso con sus militares y calieses, claro, apoyándose en una clase de intelectuales a su servicio. Naturalmente, en estos tiempos no se desangra la aurora como ayer, sino se disecan las esperanzas de vivir en democracia, donde solo tienen acceso los adulones del rey y los esclavos de la fiera.

Para los comicios del 16 de Mayo del 1978, el presidente Balaguer, continúo sembrando el cráneo de la historia con cenizas. 


Pues, el poeta de los crímenes, impuso como siempre una junta a su antojo, siendo su primer titular, el Dr. Manuel Castillo, otro esbirro del férreo Ocampo del mafioso cuento electoral, quien fuera en esos comicios recusados. Pero la pesadilla continua, ahora de manera digital.


¿Y cuál es el problema, ahora?


Entonces, lo que tiene que hacer la oposición hoy, es unificarse, en base a un programa de Patria, no hasta las elecciones como hacen siempre, para repartirse los chelitos de la junta. Y vender las elecciones. HISTORIA PATRIA


Pero el régimen sangriento no se impuso.  Se inundaron las lágrimas esta vez, El Acuerdo de Santiago regreso  al ruedo político firme en sus miras de participar en los tenebrosos comicios de 1978. Al computarse el 25% de las votaciones a su candidato presidencial, Antonio Guzmán Fernández,


Este llevaba  una gran ventaja, virtual presidente electo, pero una hambrienta manada  de militares dirigida por el coronel Benoit y bajo instrucción del jefe de la Marina de Guerra, comodoro Francisco Javier Rivera Caminero, boicoteo  el conteo de los votos en la JCE, a fuerza de fusiles en manos y ladrando en la piel de otro fraude; frente al rostro de la oscuridad, porque tumbaron la electricidad, y así desmantelaron el equipo de transmisión del escrutinio.
  
 Pero el anciano no pudo ahí, fortalecer su historia. Porque el Sol amaneció primero que  su ceguera. Y Gano el Partido Revolucionario Dominicano (PRD)



                            ¿Y cuál es el problema, ahora?


En el proceso eleccionario 1994-199, el presidente Balaguer, impone otra vez un maniller de su traba / parcializado, frente la Junta Central Electoral, el Dr. Manuel García  Lizardo.

A pesar de sus malas artes, el Partido Reformista Social Cristiano PRSC),  se enfrentó al  Dr. José Francisco Peña Gómez (PRD),y evidentemente fue derrotado. Pero el perjurio colorao, apagó el jacho en la tumba de José Francisco Peña Gómez (PRD)

Otro macuteo implementado por Balaguer fue lograr que el Partido de la 

Liberación Dominicana (PLD) cargara con sus velorios, y que sirviera como espejuelo antidemocrático en momentos que su decadente manera de reelegirse no lograra cuajar, y organizo un fascista frente patriótico.

 Con la intención de blanquear sus pecados  con el color de la bandera del berenjenal. Estos dos vaqueros, y de esa manera asquerosas, tan solo por el solio presidencial, aceleraron la muerte del negro polen


¿Y cuál es el problema, ahora.


 Roberto Rosario Márquez,fue un clarividente/ rocinante del PLD,pero por sus ronquidos, fue sustituido por el Dr. Julio Cesar Castaño Guzmán,intelectual al servicio del Estatu Quo...


Este hombre honorable, como ese pedazo de historia, hoy esta frente del timón de la nueva reelección de esa organización política en el poder, que en cuyo patio hay un León alimentándose  de hojarascas y lánguidas estrellas. Para inclinar su cachucha al 2020-2024…
Las organizaciones políticas, tienen que juzgar su verdadero rol, unirse al descamisado, sin discursos metálicos ni metáforas traidoras de acentos.


Y comprender que todo tiene su final. La historia democrática dominicana ha demostrado que no deciden unas elecciones quienes controlan la Junta Central Electoral, ni las botas sacrificadas de lodos, tampoco comprar el hambre descalza de caminos, sino la unificación de criterios patrios.¡Porque los humildes votan y otros gobiernan/deciden...!

    ¿ Y cuál es el problema, ahora

Solo el pueblo, salva al pueblo…..


Quien suscribe es periodista



Por, Danilo Correa

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