domingo, 20 de junio de 2021

 

El Nepotismo y el Estado Dominicano.

Por: Becker Márquez Bautista.

En el pasado gobierno como en el actual, se han denunciado en la República Dominicana un entramado algo nunca visto, Hermanos, primos, sobrinos, tíos, esposos, novio del compañero tal y hasta novias de hijos de funcionarios son algunos de los casos relacionados con instituciones públicas. Son denuncias que se han realizado recientemente como parte de las acciones de nepotismo.

Por años Familia completa se sustentan y se enriquecen con el estado dominicano a través del Nepotismo y para nosotros eso es una práctica fraudulenta, si nos ponemos analizar en la actualidad; podemos observar cómo estás sanguijuelas se han pegado de la teta de este gobierno en detrimentos del pueblo dominicano.

El Nepotismo. Es un sustantivo que deriva del griego nepos que significa sobrino. El mismo hace referencia a la acción de favorecer a familiares y amigos con empleos o cargos públicos pero también premios u otros favoritismos por solo el hecho de ser allegados, ya que no tienen los méritos para poder ocupar esos lugares o privilegios.

Según el Diccionario de la RAE, el nepotismo es la “desmedida preferencia que algunos dan a sus parientes para las concesiones o empleos públicos”. En el ámbito de las Empresas Familiares hablamos de nepotismo para referirnos a la tendencia existente de ofrecer puestos de trabajo a miembros de la familia propietaria por el mero hecho del parentesco, sin tener en cuenta la formación o capacidad para desarrollar las tareas requeridas por el cargo.

El nepotismo es considerado acto de corrupción política y de falta de ética en los países donde se privilegia la meritocracia, o sea que el mérito y la formación profesional es el que genera el ascenso en los cargos jerárquicos en el estado. Pero en otros países es aceptado el nepotismo, aunque no sea ético este tipo de comportamiento.

El nepotismo tiene una historia milenaria, se cree que comenzó hace cientos de años. La excusa que aluden los funcionarios que practican el nepotismo es que necesitan personas de confianza y leales para poder ocupar cargos importantes ya que no confían en otras personas para hacerlo. Esta excusa es muy poco seria ya que siempre hay profesionales que pueden ocupar cargos relevantes. Los actos de nepotismo son muy negativos para los estados y gobiernos democráticos ya que envía el mensaje al resto de los ciudadanos que los méritos y el esfuerzo profesional no son necesarios para alcanzar cargos o empleos en el gobierno, ya que solo se logra si se es amigo o familiar de alguien importante.

Uno de los primeros casos de la historia en la época romana. Cuando Pompeyo le dio relevantes responsabilidades a su yerno Metelo Escipión quien no tenía conocimientos ni experiencia en el ámbito militar. Ante esta situación Marco Antonio lo denunció en el senado y lo acusó de nepotismo.

En la Edad Media cuando varios obispos y Papas de la iglesia católica nombraron como cardenales a parientes o allegados con total favoritismo y sin cumplir con las condiciones necesarias para hacerlo legalmente. Se han encontrado casos de nepotismo en monarquías europeas y también en los estados modernos en la actualidad.

Otro caso de nepotismo muy sonado fue el que llevó a cabo Napoleón Bonaparte. Este líder francés lo que hizo fue apostar por su familia para darle determinados puestos de responsabilidad e importancia. El más conocido de todos ellos fue el que le otorgó a su hermano José Bonaparte, más conocido por Pepe Botella por su afición al alcohol, al que lo encumbró como rey de España.

El Nepotismo es un vicio punible por ley en la mayoría de los países democráticos, en especial en la Administración Pública, dado que existen códigos específicos que regulan el acceso al trabajo con el Estado. El nepotismo incluso violenta la Declaración Universal de los Derechos Humanos, entre cuyos artículos se explicita la necesaria igualdad de oportunidades de acceso al trabajo público, dado que es financiado con el dinero de todos.

Por eso planteamos una profunda revisión y modificación de la ley 41-08 de función pública, quizás la ley fue creada con un objetivo y un criterio de seriedad, pero se ha prostituido a la misma. El pueblo dominicano tiene que despertar, hay que denunciar esta práctica sin temor, y entender que esto lo único que produce es un daño a la institucionalidad del país.