martes, 2 de agosto de 2016

Pokémon GO




Paseando por el mundo intentando “cazar” las palabras que me ayude a entender los porqués de matar y de morir de manera gratuita. Por qué te eligen al azar.  La cascada de violencia que están ocurriendo; asimilar todas estas desalentadoras informaciones que a diario se suceden y que, nos sorprenden cómo si fuera la primera vez.

Quería cazar las palabras, pero mi espíritu se encogía leyendo el término de moda: Francotiradores. La historia nos ha enseñado la impiedad en la humanidad. Hemos tenido que aprendérnosla a las buenas o, a la fuerza. Pensábamos - ¿bárbaros y primitivos-en el siglo 21, qué diferencias existen de aquellos sanguinolentos y salvajes sucesos?

La violencia y las violaciones en general, como una forma actual de conducta social, política, religiosa y económica, que, incluso, se justifica y acepta. De los derechos de la mujer a decidir sobre su cuerpo. Los feminicidios. Por amar a un igual de su género. Da lo mismo que los mate La Constitución de un país, las interpretaciones de la Biblia, las radicalizaciones del Corán o, un robot.

Las tecnologías e inteligencia artificial. A la ciencia le ha sido dificilísimo irse posicionando en la gente “común”.  Abrirse paso entre las mentes menos privilegiadas, gracias, no sé, si, a Mark Zuckerberg (quizás, hasta sea proclamado como el “Dios” (otra vez un “hombre”) del siglo XXI).

La infancia está sufriendo un duro revés en nuestro país. Como si no fuera poco que un niño tenga que trabajar padeciendo de un cáncer. Las violaciones-presuntamente-de menores de edad a niñitas, parten el corazón. ¿Cómo se ha llegado a esto? Cuál es el afán de que niños agoten una energía sexual que aún no poseen, a destiempo.

Cómo saben “hacer el amor” y desconocer las profilaxis a las infecciones de transmisión sexual o, de embarazar, o embarazarse.  Pero los términos “condón y píldora” son pecados. ¿Dónde se ha fallado?  En la educación, porque mientras se fijan en la “virginidad” del pelo de una ciudadana, en las escuelas está prohibido la educación sexual.

Por supuesto, para aquellos que abrazaron y han tenido durante siglos como un estandarte el haber perdido una “costilla” ven los desperfectos de ser mujer. No pueden competir en buena lid con ellas; pero, sí están facultados por mayoría. No poseen el don de la belleza que tanto contemplan y les atrae. No tienen dos equis de cromosomas que les impide la fertilidad o no; pero que hoy día da lo mismo.

Para esto está la ciencia. Millones de-niñas y niños-mueren a diario hambrientos de pan y de cariño. Pero hasta en esto hay mezquindad. Quieren ser los dueños absolutos de los genes y de los úteros.

Madrid, España. 



Por Balbina Negreira

No hay comentarios:

Publicar un comentario