Carencia de educación y disciplina política caracteriza a altos dirigentes demócrata en Filadelfia
Por Polón Vásquez
El discurso de campaña, empleado por algunos dirigentes políticos que corren ahora para posiciones electivas en Filadelfia, carece de lógica programática, educación y disciplina política.
Parece que esos cuadros y militantes políticos, se formaron en los pasillos de las esquinas, porque en sus discursos diario, no dan muestra de orden programático, carecen de propuestas lógicas, en fin son desordenados al plantear sus objetivos como candidato.
Los electores de la comunidad quisieran escuchar propuestas políticas diáfanas, no chismes deprimentes, vulgares, injuriosos y difamatorio contra sus oponentes y/o rivales políticos.
La alta dirigencia política en ésta ciudad, está llamada a concientizar al nuevo liderazgo y educarlo para que sirvan de ejemplo y dignos a seguir por los hombres y mujeres del pueblo.
El liderazgo político que domina al Partido Demócrata en Filadelfia durante los últimos 30 años, se ha convertido en un instrumento obsoleto que, no renova sus cuadros sustitutos y emergentes.
Sin un discurso claro, no se hace política de cara al futuro. Con esa práctica socio-política, la tendencia es a desaparecer como organización política fuerte y poderosa.
El partido y sus dirigentes, todavía están a tiempo de corregir sus errores y darle paso a unas pléyades de jóvenes valiosísimos que desean ser miembros de la organización política en Filadelfia y la región valle Delaware.
Observar las mismas caras siempre, resulta aburrido y sobretodo en estos tiempos de *Redes Sociales* y la globalización de la comunicación social como instrumento mediático de la política moderna.
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