Después de que Hamás anunciara que posponía indefinidamente la liberación de los rehenes prevista para el próximo sábado por las presuntas violaciones del alto el fuego israelíes, algo que Israel niega tajantemente, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió en que si las liberaciones no suceden el sábado, Israel debería retirarse de ese acuerdo.
Lo hizo mientras daba la bienvenida al rey Abdalá II de Jordania a la Casa Blanca. También dijo Trump que confía en que Hamás cumplirá con sus demandas.
Y poco tiempo después, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió en un mensaje por video a Hamás que si no deja ir a los rehenes el sábado antes del mediodía, se reanudará la guerra en Gaza.
«Si Hamás no devuelve a nuestros rehenes antes del mediodía del sábado, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) reanudarán los combates intensamente hasta que Hamás sea finalmente derrotado», anunció Netanyahu en un vídeo al final de una reunión del gabinete de seguridad.
El primer ministro agregó: «Anoche, ordené a las FDI que desplegaran a las tropas en mayor número dentro y alrededor de la Franja de Gaza».
Poco tiempo después la portavocía militar confirmó que «el refuerzo de tropas y la movilización de las reservas se está llevando a cabo con el fin de prepararse para diversos escenarios».
Un alto cargo israelí dijo, sin revelar su identidad, que el gabinete de seguridad espera la liberación de los nueve rehenes vivos incluidos en primera fase del acuerdo «dentro de unos días».
Por su parte, tras un día de manifestaciones espontáneas por el país, el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas emitió un comunicado instando a Israel a «no dar marcha atrás», después de las declaraciones de Netanyahu sobre la posibilidad de reanudar los combates si los nueve rehenes restantes vivos de la primera etapa no son liberados el sábado.
«Primer ministro, usted tomó la decisión de traer a todos nuestros rehenes a casa a través de un acuerdo. No debemos dar marcha atrás. No podemos permitir que los rehenes se consuman en cautiverio», comunicó el foro.
«Como todos presenciamos el sábado pasado, el tiempo se está agotando para los rehenes. Los impactantes eventos de los últimos días demuestran la urgente necesidad de acelerar el cronograma, completar las negociaciones de inmediato y traer de regreso a todos los rehenes con la máxima urgencia», añadió.
Los negociadores israelíes enviados a tratar “detalles técnicos” de la segunda fase del acuerdo de tres etapas, volvieron el lunes. Se trataba de una delegación nueva, según un informe del Canal 12, con un hombre clave del gobierno en el tema de los rehenes, Gal Hirsch, y un alto funcionario del Shin Bet, también muy cercano a Netanyahu, que reemplazaron al jefe de la agencia de seguridad Mosad, Ronen Bar, a quien Netanyahu destituyó de su función de negociador.
Según varios observadores las señales que está mandando Netanyahu son de querer hacer descarrilar el acuerdo, por mandar una delegación menor y sin poderes, además de tarde.
Fuente: La Razón