Hoy se cumple el 42 aniversario del vil asesinato del
periodista Orlando Martínez Howley, quien murió por estar comprometido a la
verdad, identificado con las mejores causas y defendiendo la democracia de su
país.
Orlando, con sus
preguntas que a la vista de un intolerante régimen fueron necias, con ellas
desató la ira del entonces presidente de la República doctor Joaquín Balaguer,
y fue como los oficiales de más altos rangos de la época, generales Salvador
Lluberes Montás, Joaquín Antonio Pou Castro, y el cabo Luís Emilio de la Rosa, Marino Durán
Cabrera, Alfredo Lluberes Ricard, entre otros tomaron acción en las
inmediaciones de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) al interceptarlo
para arrancarle la vida de inmediato.
Hoy solo quiero rendir honor a ese titán del periodismo
incorruptible, que por su lucha contra la corrupción del gobierno balaguerista
su vida le fue malograda, gloria al mártir del periodismo dominicano, a la
decencia y responsabilidad y honradez.
Pero hoy también me aboco a escribir un par de líneas para
recordar a la cúpula política de la sociedad
nacional, a los representantes de los partidos, que la República Dominicana
debería tener una democracia inquebrantable, que tiene como punto de partida el
año 1978 con la llegada al poder de Don Antonio Guzmán Fernández, fue como resurgió
la democracia en el país, porque el pueblo le dijo no al régimen de los 12 años
balaguerista.
La clase periodística debe ser respetada no importa la alteza
de quienes pretenden acallarla sin derecho alguno, como sucedió el pasado
Jueves cuando la prensa cubría los hechos acontecidos en la Procuraduría
General de la República, a la sazón de los interrogatorios al presidente del
Senado Reynaldo Pared Pérez, quien sería interrogado en torno a los escándalos sobre
la Odebrecht, por el señor Procurador General Lic. Alan Rodríguez
Este ha sido un hecho muy sospechoso, justamente al cumplirse
el 42 aniversario del asesinato del periodista Orlando Martínez Howley.
Pared Pérez, permitió que la ira de su alteza y la trulla de
perros salvajes del séquito que le acompañaba, golpearan a los miembros de la
prensa que se encontraban allí, incluyendo al periodista Franklin Guerrero de
CDN, y otros profesionales de diversos medios de prensa que cubrían fuente.
Hechos tan abominables no deberían repetirse, sin embargo se repiten, justamente
cuando se cumple un aniversario más de asesinato de Orlando Martínez Howley,
quien murió en su lucha contra la corrupción y en defensa de la democracia
dominicana que tanta sangre costó a la juventud y lágrimas derramadas por las
madres de todo el país.
El 17 de Marzo, es un día que para los dominicanos debería
ser declarado como el día mártir de los
periodistas, en honor a Orlando Martínez, quien no le importó ofrendar su vida
enfrentando a los sátrapas del régimen de Joaquín Balaguer, remanentes en su
mayoría de la tiranía trujillista.
El Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) y demás
organizaciones relacionadas con la prensa deben luchar para instituir esta
fecha y así recordar con esmero la memoria de sus hijos caídos, Orlando Mazara,
Guido Gil, Plinio Díaz, Gregorio García Castro, Marcelino Vega, José Silvestre,
Blas Olivo, Leo Martínez y Luís Manuel Medina, entre otros. Por el respeto al
trabajo de la prensa, viva la memoria de Orlando Martínez.
Por Olga Capellán.-