El presidente de Hungría ha participado en un almuerzo en la Casa Blanca, donde ha llegado con un objetivo: evitar las sanciones al petróleo ruso.
El presidente de Hungría, Viktor Orbán, ha visitado este viernes la Casa Blanca, donde ha almorzado con su homólogo estadounidense, y donde ha ironizado sobre las opciones de victoria deUcrania en su guerra de Ucrania contra Rusia
En una rueda de prensa celebrada antes de la comida, un periodista preguntó al mandatario magiar, aliado de Putin, acerca del conflicto. Ante las respuestas de Orbán, Donald Trump le preguntó: «¿Entonces crees que Ucrania no puede ganar la guerra?».
Viktor Orbán, alzando las manos en un elocuente gesto, respondió: «Puede ocurrir un milagro», respuesta que provocó una sonrisa en Donald Trump, que agregó: «Sí, así es».

El principal objetivo de la visita de Orbán a Washington es evitar sanciones al petróleo ruso y que Hungría siga adquiriéndolo, pese a las advertencias de Trump al resto de países europeos al respecto, a quienes prohíbe hacerlo.
En todo caso, Trump, que también tiene buena sintonía con Orbán, se ha mostrado abierto a que Hungría pueda seguir comprando petróleo ruso: «Lo estamos analizando; a ellos les resulta difícil obtener petróleo y gas de otras zonas».
Antes del encuentro, el ministro húngaro de Exteriores, Péter Szijjártó, ha dicho que su país necesita firmar ese acuerdo por «las realidades geográficas» y ha remarcado que la energía rusa «es esencial para la seguridad energética de Hungría».
Fuente: 20 Minutos
No hay comentarios:
Publicar un comentario