El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, en una llamada telefónica mantenida este domingo con su homólogo de China, Wang Yi, ha abordado la situación del pueblo palestino en la asediada Franja de Gaza.
En este sentido, el jefe de la Diplomacia iraní ha avisado que la situación en la región es muy sensible y ahora la prioridad inmediata es detener los ataques contra las mujeres, los niños y los civiles de Gaza.
En alusión al impactante número de muertos y heridos causados por los ataques a hogares y zonas residenciales e incluso centros médicos en Gaza, así como al uso de armas prohibidas, incluidos informes sobre el uso de bombas de fósforo, bloqueos humanos y cortes de agua, electricidad y combustible en Gaza, Amir Abdolahian ha tachado esto de «un claro ejemplo de crimen de guerra y matanza masiva de residentes de Gaza».
El ministro de Exteriores de Irán también se ha referido a su viaje regional y reunión con altos funcionarios de los países de la zona, así como con los líderes de algunos grupos de la Resistencia en la región, ha recalcado que la situación es muy peligrosa y preocupante y existe la posibilidad de que la situación se salga de control en cualquier momento.
El canciller iraní ha agregado que si los crímenes no cesan y los ataques en curso contra Gaza no terminan, nadie puede garantizar que el alcance de la crisis no se ampliará.
Recordando la responsabilidad del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) en el ámbito de la paz y la seguridad internacionales, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán ha llamado a China a utilizar sus capacidades para frenar los ataques.
En esta conversación, el canciller chino ha expresado su preocupación por la delicada situación actual y ha remarcado que la comunidad internacional debe oponerse al ataque a civiles y el CSNU debe asumir esta responsabilidad y desempeñar su papel inherente.
Al respecto, ha tildado de inaceptable un castigo colectivo contra el pueblo de Gaza y ha puesto de relieve la necesidad de crear un corredor de ayuda humanitaria.
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