- La operación se ha saldado con 16 detenidos asentados en las localidades de Madrid y Galapagar.
La Guardia Civil ha desmantelado este lunes al grupo más violento de la banda juvenil de los Latin Kings, que operaban en Madrid y Galapagar, con el objetivo de asentarse en este territorio frente a bandas rivales y tratar de expandirse a otras zonas. Los agentes han llevado a cabo el golpe en el marco de la ‘Operación Torcidos’, que ha permitido la detención de 16 personas, entre ellas Eric Javier Velastegui, el fundador de la organización en España.
Esta operación, que se desarrolló la semana pasada en la Comunidad de Madrid y Galicia, ha sido presentada este lunes en la sede de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid en Tres Cantos por la delegada del Gobierno en la región, Mercedes González, así como del general jefe de la zona norte de la Comandancia madrileña, José Antonio Berrocal, y el responsable de Policía Judicial e Información de la Benemérita en Madrid, el teniente coronel Carlos Caro.
Este grupo de Latin Kings pertenecía a la sección S.T.A.S (Sagrada Tribu American Spain) y era una de las facciones más violentas del grupo juvenil. Ahora, Velastegui, que se encuentra en prisión desde principios de los 2000 cumpliendo una condena por violación, intentaba reactivar y reorganizar la banda a través de este capítulo de torcidos o disidentes de la estructura original.
Entre los detenidos figuran también un menor de edad y una mujer, pareja de Velastegui y que, según los responsables de la investigación, colaboraba en las actividades de expansión de esta banda a la cual se han intervenido varias armas blancas de grandes dimensiones y que pretendía aumentar su arsenal, también con algún arma de fuego.
Según la Guardia Civil, esta sección de la banda «se trata de un grupo perfectamente organizado, con una clara finalidad de cometer delitos, y una férrea disciplina interna». Para financiarse, han explicado que estos miembros de este capítulo recurrían tanto a robos con violencia e intimidación, como a amenazas y tráfico de drogas. Asimismo, solían recurrir a eventos de participación obligatoria en los que recaudaban fondos.
Los agentes también han registrado una alta labor de captación de menores en colegios tanto de Galapagar como de municipios vecinos. En este sentido, han constatado las dificultades que estos jóvenes tenían para abandonar la banda, «actitud que conllevaba sanciones«, han detallado.
La mayoría de estos grupos busca incorporar a sus filas a menores de edad, bien ocupando una posición jerárquica de menor peso, o como aspirantes que aún no han adquirido la condición de miembros de pleno derecho.
Operativo policial
La facción que lideraba Velastegui había tratado sin éxito de obtener el respaldo de la jefatura central de los Latin King en Chicago, por lo que aunque no constan enfrentamientos entre los torcidos y la facción original en España, la Guardia Civil sí tenía conocimiento de sus diferencias, por lo que las disputas violentas entre ellos podrían haber sucedido en cualquier momento.
Los agentes han registrado cinco domicilios en los que ha hallado armas blancas de grandes dimensiones, una daga metálica, básculas de precisión, literatura, simbología e indumentaria propia de esta organización, así como dinero en efectivo. De los 16 detenidos, el Juzgado ha decretado medidas cautelares para doce de ellos.
También se intervino documentación -la llamada «literatura» de la banda-, que son las directrices de los Latin Kings, de obligado cumplimiento para todos los miembros, con riesgo de castigo para quien las incumpla. Los castigos suelen ser palizas grupales.
El dispositivo policial de esta operación se ha contado con la participación de agentes del Servicio de Información de la Guardia Civil, de la USECIC de Madrid, así como la colaboración de la Policía Municipal de Madrid y Policía Local de Galapagar, e Instituciones Penitenciaria.
Durante la rueda de prensa, la delegada del Gobierno ha destacado el esfuerzo que los miembros de la Guardia Civil están desarrollando dentro del plan especial contra bandas juveniles violentas, que en su primer año de vigencia y, en la demarcación del Instituto Armado, ha permitido la identificación de 26.520 personas, 132 detenciones, 143 incautaciones de armas y 3.196 actas de droga.
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