Importancia de la política como científica
POR RAFAEL SANTOS
Cuando la práctica política se nutre de realidades que tienden a beneficiar a los pueblos, ya sea a través de la implementación precisamente de lo que son las POLÍTICAS PÚBLICAS las cuales se diseñan para beneficiar al conglomerado, el desarrollo integral de sus habitantes no tarda en llegar.
Esto es así, (claro está) si quienes desde la cúspides de los diferentes organismos del estado tienen los correctos conocimientos de lo que encierran tanto la Política como ciencia, como lo que se llama en verdad POLITICAS PUBLICAS.
De ahí es que el ejercicio de esta (la política), debe implementarse en base a lo que son los conocimientos y las herramientas que de manera científica nos ofrecen los textos en cuestión, para llevar hasta el seno de los menos entendidos, esas herramientas modernas, las cuales, al final nos puedan garantizar como sociedad en desarrollo, un mejor futuro en términos colectivos.
En pleno siglo 21 y como sociedad que desea caminar sobre las ruedas del desarrollo integral, que es a fin de cuenta el discurso de todos aquellos que se dicen llamar políticos, no podemos estar de espalda a los conocimientos y a las nuevas regulaciones que nos marcan las tendencias de la modernidad.
Por ser esta una de las herramientas más fundamentales que desde tiempos inmemoriales el hombre ha venido utilizando para lograr y conquistar aquellos espacios que desde sus diversos puntos de vista son determinantes en las diversas sociedades, como lo es por ejemplo el poder, es por lo tanto que esta debe ocupar una de las principales casillas dentro del esquema del o los conocimientos, para que de esta manera nuestras sociedades se encarrilen por el camino del discernimiento sobre la profundización de esta noble ciencia.
Sin embargo, para ellos tanto los partidos, agrupaciones, como movimientos políticos, son de extrema importancia para junto a los gobiernos y el estado mismo como garante de que se cumplan nuestras leyes y normativas tercermundistas, llevar conocimientos a los diversos sectores, para por lo menos iniciar así un proceso del cual todos los que de una manera o de otra deseamos el progreso colectivo, a la larga vendríamos a salir beneficiados y tal vez podríamos lograr lo que para quien escribe es un sueño, y es, que en las comunidades, pueblos y países, existan entidades pensantes con la suficiente capacidad como para trazar bajo la línea de la objetividad, planes y proyectos que nos beneficien a todos y con la debida equidad.
Es por ellos, que tanto los Presidentes de nuestros países, así como los congresistas, entiéndase diputados y senadores, los alcaldes con sus regidores, o concejales, que necesitan de la implementación de técnicas y habilidades las cuales sobre las bases del comportamiento de la ética y la moral, estos bien pudieran adquieran los conocimientos necesarios para ponerlos al servicio de la colectividad.
Son los pasados titulares, junto a los partidos, movimientos y agrupaciones políticas, los máximos responsables, de que los pueblos adquieran a través de las diversas herramientas dispuestas, las preparaciones que sobre la materia se hacen imprescindibles para que nuestras sociedades se desarrollen en base a lo que después de la filosofía es la piedra angular de la sostenibilidad y la búsqueda de lo que bien podría llamarse el desarrollo colectivo y/o integral de nuestros países tercermundistas.
Cuando nuestras sociedades cuenten con las herramientas de los conocimientos politológicos la cual es tan necesaria para su sostenibilidad emocional, las mismas tienden a generar tranquilidad y armonía ya que quienes dirigen a los conglomerados son personas con conocimientos reales de lo que en verdad es la política como ciencia.
De ahí, la importancia de que las autoridades políticas de los pueblos conozcan además de lo que es la parte empírica de esta noble práctica, también la parte científica, la cual, entre otras cosas, dota a la persona no sólo de inteligencia político – emocional (arma poderosísima dentro de la práctica humana), sino además, de habilidades, y estas dos, combinadas, paren en la psiquis de la persona, un tercer elemento que a nuestro juicio es el más importante dentro de lo que es el engranaje psico- socia
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