La reivindicación de las raíces comunes de las identidades como elemento necesario para construir la paz fue una de las principales ideas expuestas en el primero de los debates previos al III Congreso Internacional Edificar la Paz en el Siglo XXI (República Dominicana, junio 2017) que se celebró este miércoles 21 de septiembre en el Palau Macaya de Barcelona, en esta ocasión centrado en el eje de las identidades.
El primero de los conferenciantes, el vicepresidente de la Fundación Carta de la Paz y catedrático de Filosofía de la Universidad Ramon Llull (Barcelona), Francesc Torralba, destacó que una de las claves en la construcción de la paz es ser conscientes que “lo que nos iguala es más profundo que lo que nos separa” y la necesidad de considerar las diferencias “como una riqueza y no como una posibilidad de exclusión”.
Por otra parte, Torralba también hizo especial hincapié en la diferencia entre identidadesimpuras e identidades puras y el peligro que supone la reivindicación de estas últimas. “En la historia no hay identidades puras y cuando se han intentado conseguir han sido excluyentes”, aseguró el catedrático recordando el nazismo. Y aún insistió: “Cualquier sueño de pureza ha tenido unas consecuencias terribles, porque la realidad son las identidades impuras, la mezcla”.
En la misma línea también se expresó el otro conferenciante del acto, Alberto Fernández, sociólogo, gestor cultural y decano de la comunidad dominicana en Barcelona: “Las identidades son impuras porque se forman a partir de aluviones de gente en un territorio”. Y basó su exposición en el caso de República Dominicana, identidad creada a partir de la mezclada de españoles, africanos, indígenas y posteriormente chinos, palestinos o libaneses.
Pero el principal conflicto identitario de los republicanos actualmente es con los haitianos, con quien comparten la isla de La Española, casi 360 quilómetros de frontera. “Hoy el miedo de los republicanos a haitianizarse es preocupante, pero esto sólo se resolverá en generaciones y con la ayuda de varias instituciones”, aseguró el sociólogo. Y, ante una numerosa presencia de personas nacidas en este país del Caribe, insistió: “hoy muchos dominicanos piensan que Haití es lo peor del mundo, pero con ellos compartimos mucho y, a diferencia de nosotros, ellos son personas con muchos dignidad”.
El próximo debate precongresual, que tendrá lugar en Barcelona el próximo 19 de octubre, estará dedicado al eje temático de la justicia social e intentará responder a la pregunta: “¿La justicia social es condición indispensable para la paz?”. Estos debates previos al III Congreso Internacional Edificar la Paz en el Siglo XXI, que se celebrará los días 26, 27 y 28 de junio en Santiago de los Caballeros ( República Dominicana ), cuentan con el apoyo de la Diputación de Barcelona, la Obra Social ‘la Caixa’ y la Asociación de Profesionales Dominicanos en Cataluña.
NOTA DE LA FUNDACIÓN
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